Estamos en una época del año proclive para
las fantasías, cuentos de papá Noel, de reyes magos.
Desde inicio de año, tanto en el programa Abrapalabras, como en dos columnas de Primera Línea (Trancos y palabras; Fotos y muletillas) cuestioné
el exceso de Marketing, y esa política que se hace para las fotos.
Anoche en el
partido Justicialista, el propio Jefe de Gabinete sacó una artillería verbal
para cuestionar el exceso de marketing y de fotos.
Jorge Capitanich dijo "Mucho de lo que se hace hoy es para la foto, para hacer presencia, hay mucho de marketing y de imagen", y notificó para quienes "no están debidamente calificados" que "solamente podemos gobernar quienes tenemos ideas, y transformar esas ideas en acción"
Jorge Capitanich dijo "Mucho de lo que se hace hoy es para la foto, para hacer presencia, hay mucho de marketing y de imagen", y notificó para quienes "no están debidamente calificados" que "solamente podemos gobernar quienes tenemos ideas, y transformar esas ideas en acción"
En el ruido del palabrerío electoral se debe tener
en cuenta que desde el año 1.999 las formulas a la gobernación del
justicialismo, se cierran bajo los parámetros definidos por Jorge Capitanich. Si
tomamos los resultados electorales de los últimos 23 años, coincidiremos que Jorge
Capitanich es el único mariscal de las victorias peronistas. (Si está de
acuerdo, siga leyendo).
El montenegrino, sigue siendo el gran hermano
de la política chaqueña. Quienes creyeron consolidarse con el manual de condicionamientos,
ya se dieron cuenta del esfuerzo estéril que realizaron.La escudería exitosa para la mayoría de los
chaqueños es la de Jorge Capitanich, y como tal allí están puestas las miradas
para saber cuál será el piloto elegido para la próxima temporada.
El gustavismo, todavía no tiene un candidato
posicionado en las encuestas. Sabe de antemano que no tiene chances para
fabricar un candidato ganador en las generales. Se plantea como objetivo, no
llegar tan deteriorado a la mesa de las negociaciones para defender su espacio
de poder.
En las elecciones del año pasado, la lógica
fue similar. Domingo Peppo fue propuesto como candidato (muleto o carnada) a
Senador para fortalecer el acuerdo que culminó con Beatriz Vázquez y Gustavo Martínez
Padre; y Eduardo Aguilar ocupando las bancas planeadas.
Si consideramos que el candidato natural del
gustavismo es el propio Gustavo Martínez, entonces el desafío es fabricar un candidato sintético, muleto
o carnada o como quiera llamarse.
Pidió la re-reelección de Capitanich, luego apareció Ricardo Sánchez. En las últimas horas reflotaron el nombre de Domingo Peppo.
Pidió la re-reelección de Capitanich, luego apareció Ricardo Sánchez. En las últimas horas reflotaron el nombre de Domingo Peppo.
El intendente de Villa Ángela, intentó
presentarse como un candidato de tercera posición pero no pudo instalarse como
tal. En su trajinar de precandidato desde hace años viene usufructuando de una
parte de las estructuras del gustavismo. La misma mesa de conducción del
gustavismo que lo propuso para senador en el 2.013, ahora lo propone como el
candidato muleto o candidato carnada para los próximos meses.
Gabriel Ninoff, en un último esfuerzo para enmarcar
la precandidatura de "Mingo" confesó que se podría sintetizar la
unidad con el agregado de Hugo Sager en la fórmula.
Pero el intendente de
Puerto Tirol, está compenetrado con la tarea de fortalecer Chaco Avanza, por lo
cual ese globo de ensayo no se ajustaría a una realidad posible.
Yo no estaría en condiciones de asegurar pero
intuyo que esta forma de actuar del gustavismo, produce un creciente deterioro en
la credibilidad del electorado no aparatizado.
La credibilidad es lo más difícil de cosechar en la política, y más cuando se utilizan semillas envenenadas. La ortodoxia del gustavismo, no pierde ningún minuto para acreditar su notable capacidad para levantar tranqueras contra la credibilidad.
Gustavo Martínez o Eduardo Aguilar, parece
ser el dilema que desde hace algunos años, tiene entrampado al funcionario de
SAMEEP. Son dirigentes contemporáneos pero con estilos e ideas diferentes a la hora de hacer política.
Esto puede sonar temerario pero me respaldo en los distintos discursos ofrecidos
por Gustavo Martínez en la Sociedad Rural. Los oídos de la muchedumbre que
asiste a la rural, no dejan de escuchar una especie de catarsis de Gustavo Martínez.
Eduardo Aguilar se transformó en un escollo
infranqueable.
Cuando las operaciones de prensa indicaban que Gustavo Martínez quería la vicegobernación en el 2.011; Jorge Capitanich, para contener las pretensiones sin mandarlo a terapia intensiva, dio el guiño para que Aguilar ingrese a la cancha resistenciana.
Lo propio ocurrió dos años más tardes. El gustavismo propuso a Domingo Peppo de candidato carnada para tratar de evitar que se produzca lo que ya era inexorable en los análisis serios del escenario político: Eduardo Aguilar encabezando la lista de senadores.
El interrogante es ¿Cómo se desatará el nudo de este dilema?. En los años anteriores todos comieron perdices. Más allá de las tensiones de la dinámica interna, nada hace presuponer que Jorge Capitanich se desligue por completo de la estructuración del poder después del 2.015.
Cuando las operaciones de prensa indicaban que Gustavo Martínez quería la vicegobernación en el 2.011; Jorge Capitanich, para contener las pretensiones sin mandarlo a terapia intensiva, dio el guiño para que Aguilar ingrese a la cancha resistenciana.
Lo propio ocurrió dos años más tardes. El gustavismo propuso a Domingo Peppo de candidato carnada para tratar de evitar que se produzca lo que ya era inexorable en los análisis serios del escenario político: Eduardo Aguilar encabezando la lista de senadores.
El interrogante es ¿Cómo se desatará el nudo de este dilema?. En los años anteriores todos comieron perdices. Más allá de las tensiones de la dinámica interna, nada hace presuponer que Jorge Capitanich se desligue por completo de la estructuración del poder después del 2.015.
Gustavo Martínez discute una parcela del poder, mientras que Domingo Peppo, el marketinero del peronismo, busca una precandidatura a gobernador. El peronismo sabe eso de "Cámpora al gobierno, Perón al poder". En este caso, el poder principal, legitimado por más del 60%, está en manos de Jorge Capitanich.
El arquitecto principal diseña buscando
el equilibrio con los sectores que tienen determinado poder. Así se observa
cuando se arman las listas legislativas, donde la zona de Villa Ángela, y San Martín llevan un diputado, el gustavismo otros tantos, el coquismo ocupa las
primeras plazas, el kirchnerismo su parte, la juventud también.
Los últimos movimientos políticos marcaron
las líneas de la cancha. Chaco Avanza se presentó con muchas fuerzas en Sáenz
Peña; y la Corriente de expresión peronista se reunió en Resistencia para
hablar de una fórmula de consenso.
Tampoco voy a inventar la pólvora si digo que
los consensos políticos de Jorge Capitanich con el gustavismo, siempre fueron
un entramado de cargos, pero (hasta aquí) nunca culminaron en una fórmula de
consenso. Y si así fuera, es importante advertir que pocas veces alguien cedió
el primer lugar de una formula. Estas ideas, solamente son aceptables en un
clima festivo como el que se inicia en el mes de diciembre. El consenso o las
PASO se harán conforme los criterios y la hoja de ruta del líder Jorge
Capitanich.
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